EL ASPARTASMO: ADITIVO CONTROVERTIDO.

El Aspartamo es uno de los aditivos que más controversia ha levantado en la historia. Algunos estudios lo vinculan con la leucemia y diferentes tipos de linfomas. Ha sido y continua siendo el tópico de continuas protestas entre médicos, científicos y grupos de consumidores que alegan que este endulzante artificial nunca debió haber sido puesto en el mercado por sus nocivos efectos en la salud.

El aspartamo es un metiléster de dos aminoácidos naturales, el ácido aspártico y la fenilalanina, que en condiciones normales (estómago) se hidroliza liberando ambos aminoácidos y sólo bajo ciertas condiciones extremas de PH podría aparecer metanol, cuyo metabolito hepático, el formaldehído, podría resultar tóxico tal como fue demostrado por el Dr. Marià Alemany, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad de Barcelona en 1998.
Historia del Aspartamo:

Había una vez una substancia llamada aspartamo, un agente que fue catalogado por el Pentágono como un agente bioquímico de guerra. Hoy en día es parte integral de la dieta moderna. Vendido comercialmente bajo nombres como NutraSweet, Canderel y distintos nombres comerciales, el aspartamo se puede encontrar en más de 5.000 alimentos, incluyendo bebidas gaseosas, goma de mascar, edulcorantes de mesa, productos “light” o bajos en grasa, alimentos para diabéticos, cereales para el desayuno, mermeladas, dulces, vitaminas, medicamentos etc. Esto significa que probablemente usted y su familia se encuentren entre los dos tercios de la población adulta y el 40 por ciento de los niños que ingieren regularmente este edulcorante artificial. Debido a que no contiene calorías, el aspartamo se considera una bendición para las personas que cuidan la forma de su cuerpo e intentan evitar los alimentos que contienen muchas calorias. Si lo reflexionamos teniendo solamente en cuenta las calorias nos puede parecer un aditivo seguro y sano.Pero según los científicos que son independientes, el aspartamo puede producir una serie de efectos adversos en los seres humanos, por ejemplo dolores de cabeza, pérdida de memoria, cambios de humor, crisis convulsivas, esclerosis múltiple y síntomas similares al Parkinson, tumores, leucemia y efectos cancerígenos. Las pruebas convincentes llevadas a cabo por científicos, abogados y otros grupos de consumidores, concluyó en que el aspartamo produce graves daños en el sistema nervioso central y se ha demostrado que causa cáncer en animales. Sin embargo la FDA (Food and Drug Administration) aprobó el aspartamo inicialmente en 1974. Durante años se dudó si ponerlo en el mercado por sus efectos nocivos, pero finalmente en 1981 fue aprobado su uso en mezclas de polvos y endulzantes de mesa y en 1996 fue aprobado su uso en todos los alimentos, bebidas, etc. incluyendo productos como aderezos para ensaladas y snacks cuya aprobación no habia sido obtenida.

Un buen ejemplo sobre algunos estudios fue el llevado a cabo en el 2005 por un científico Italiano: Morando Soffritti de la Fundación Ramazzini, reavivando la polémica sobre el peligro del aspartamo. Después de un estudio con 1800 ratas durante años, el equipo de investigadores que él lideró en la septentrional ciudad italiana de Bolonia concluyó que el aspartamo podría tener efectos cancerígenos.
Según H.J. Roberts; “El consumo habitual de productos dietéticos que contienen una sustancia química conocida como aspartamo no solo puede provocar enfermedades, sino también adicción clínica. A treinta y tres (5.6%) de 540 personas que reaccionaron al aspartamo en el reciente experimento llevado a cabo, les fue difícil o imposible dejar de consumirlo por experimentar graves síntomas de síndrome de abstinencia”. H.J. Roberts termina concluyendo en sus descripciones, que los afectados o sus pacientes (especialmente padres de niños afectados) utilizaron términos específicos tales como “adicto” o “adicción”. También asegura que “las personas que utilizaron otros términos comparables fueron excluidos, a pesar de que experimentaban un síndrome de abstinencia similar”.
Sin embargo las recomendaciones de algunos médicos producen escalofríos y siembran muchas dudas ante la población. Por ejemplo el Dr. David Agus uno de los médicos de cancer e investigación biomédica más conocidos del mundo que ha recibido muchos premios y honores de la American Cancer Society, Sloan-Kettering Institute, The International Myeloma Foundation Visionary Science, The Health Network Foundation y  autor del libro: “The End of Ilness”, recomieda una dosis diaria de aspirina ya que según él, si se toma junto con una dosis de estatina (se conoce como estatina a un grupo de fármacos usados para disminuir el colesterol en sus distintas formas), reduce la incidencia del cáncer de colon en un 60%. ¿Adivinan uno de los componentes de la aspirina y de la mayoría de medicamentos?: el aspartamo. Como bien dice el economista Xavier Sala i Martin “tener un Nobel no te exime de decir idioteces”.
En definitiva, todos estos datos y estudios nos llevan a la conclusión de que la fuerza política ganó ante las evidencias científicas y el aspartamo fue aprobado. La FDA a su vez abrió las compuertas para la aprobación rápida del aspartamo en más de 70 autoridades reguladoras en todo el mundo, sin embargo, los hallazgos científicos sugieren de manera abrumadora que hay problemas reales que no pueden seguir siendo ocultados debajo de la alfombra.

AUTOR: Sonia Banyuls.