jueves, 3 de enero de 2013

BARRANQUISMO Y BICICLETA EN MALLORCA (2ª PARTE)

En el número anterior nos quedamos a punto de comenzar a describir nuestras excursiones por Mallorca. Como ya comentamos, nos habíamos propuesto recorrer parte de la isla con la bicicleta de carretera y para completar nuestra estancia combinamos este deporte con la actividad de descenso de barrancos.
Decidimos realizar tres excursiones con la bicicleta de carretera en la Sierra de Tramuntana por sus zonas más emblemáticas. Esta sierra constituye la alineación montañosa más grande de Mallorca y el espacio natural más extenso, de gran valor ecológico.

PRIMER DIA: (DEIA-VALDEMOSA-PALMA-SOLLER- DEIA).
Etapa de 60 km. Fue una toma de contacto con la Sierra de Tramuntana iniciamos la ruta por la carretera que va a Valdemosa paralela al mar, una carretera con pendientes muy moderadas que invita a paradas para observar el color azul del mar y la diversa vegetación. Desde Valdemosa iniciamos un descenso rápido hacia la carretera de Buyola donde tras unos cuantos kilómetros de llaneo tomaríamos la carretera que nos dirige a Soller y Puerto de Soller que al principio es de pendiente muy discreta para ir aumentando hasta una media del 6% en los últimos 5km., haciendo de esta subida una delicia en cada curva que te dispara para ir aumentando el ritmo y coronar el puerto como si fueras una máquina, fotos de rigor y bajada por las muchas curvas de 180º bien peraltadas y de buena pendiente. Una vez en Soller tentempié y vuelta a Deiá por la carretera que perfila la costa disfrutando nuevamente de un paisaje esplendido pero de distinto color por la distinta situación del sol.

SEGUNDO DIA: (DEIA-LLUC-INCA-S’ESGLEIETA-VALDEMOSA-DEIA)
Etapa de 100 Km. Salida desde Deiá hacia Soller donde comenzamos la subida a los dos embalses de Cuber y Gorg Blau camino de de Lluc, larga y dura sobre todo por el 7% de pendiente, media que te invita a apretar el ritmo. Son deliciosas las vistas y el paisaje de encinas y pino en las partes más bajas y menos expuesta a la climatología más dura que soporta esta sierra. Desde Lluc la bajada a Inca es rápida y técnica donde la vegetación de encina y pino da paso al paisaje transformado por el hombre desde siglos de gran riqueza paisajística. Desde Inca hasta la S’ Esgleieta es carretera llana y rápida que da paso a la última parte de la ruta, una subida a Valdemosa donde el último tramo se hace un poco duro, pero vale la pena por las hermosas vistas del pueblo.

TERCER DIA: (DEIA-BANYALBUFAR-ANDRATX-PUIGPUNYET-ESPORTES-DEIA)
Fue el día que más madrugamos queríamos tomarnos la ruta con tranquilidad, para echar el día, disfrutando de la primera parte del recorrido y llegar al Port d’ Andratx con tiempo suficiente para verlo con calma siguiendo toda la costa, pasando por Valdemosa, Banyalbufar y Estellencs un carretera de gran bellezas por sus vistas y paisajes, sin mucha dureza si la haces en este sentido. Desde Port d’ Andratx, después de un magnifico helado y una corta visita al puerto, iniciamos nuestro camino hacia Es Capdella, Galilea y Puigpunyent por el interior, como era de esperar de subida que se nos hizo durísimo hasta Esporles, donde hicimos otra parada, esta más corta para recuperar fuerzas. Desde Esporles un recorrido bonito pero bastante duro por los kilómetros que llevábamos encima y por el desnivel acumulado de la jornada que no nos dio tregua hasta Nova Valdemosa, donde por fin pudimos ver la luz… desde ahí a  Valdemosa y luego Deiá que podríamos decir que con la primera parte de la ruta era de gran comodidad para nuestras piernas que llevan un buen tute.

El litoral de la Sierra de Tramuntana es abrupto, con pocas calas y unos pronunciados acantilados. Constituye la zona de modelado cárstico más relevante de Mallorca, con una presencia importante de roca calcárea erosionada por los efectos del tiempo y el agua. Esto da lugar a profundos torrentes, como el de Torrente de Pareis, que en la zona es conocido como Sa Fosca llega a tener 200 m de altura.
El descenso de barrancos en Mallorca es todavía muy desconocido, y eso que para los entendidos de barranquismo, allí se encuentra el mítico barranco del Sa Fosca uno de los mejores barrancos de Europa, (mitad del barranco con luz solar, mitad del barranco a oscuras) y por otra parte las sensaciones que experimenta el practicante de ésta actividad cuando varios de sus barrancos llegan hasta el mar: una combinación de montaña, técnicas de descenso y un final espectacular.

Aunque también hay barrancos secos, lo ideal es ir en época de lluvias para que los barrancos tengan agua, así que lo mejor es otoño o primavera. Nosotros fuimos en el mes de septiembre, y dado que el año 2011 ha sido bastante seco, nos tuvimos que conformar con hacer tres barrancos secos, eso sí acabamos en el mar disfrutando de unos paisajes increíbles. El barranco Sa Fosca que era nuestro objetivo tendrá que esperar para otro de nuestros viajes. Lo que le ha dado fama a éste barranco es su enorme belleza, sus altísimas paredes, el color y la profundidad de sus pozas y sobre todo sus impresionantes oscuros, que te sumergen en un escenario fascinante en medio de una oscuridad completa y atemporal. Las técnicas modernas, una información detallada del barranco  y la experiencia previa en este deporte de aventura  permiten bajar hoy en apenas cinco horas, cuando en su día cuando se descubrió este barranco se tardaron cuarenta y ocho horas.

En resumen, una combinación de dos actividades que armonizan el esfuerzo de la bicicleta y el dominio de las cuerdas y habilidades del descenso de barrancos, permitiéndonos jornadas de intensidades muy diferentes y de sensaciones muy agradables en un entorno tan maravilloso como la Isla de Mallorca.

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