“Algunos paisajes y barrancos de la isla nos mostraron una riqueza de contrastes inimaginable.”
Es la tercera isla que visitamos este año, algo tienen las Islas Baleares que siempre queremos que estén presentes en la planificación de nuestras vacaciones, te piden volver y volver, en ocasiones para escalar, (posee innumerables sectores de escalada y zonas de psicoblock,), en otras por sus magnificas rutas de bicicleta de montaña y bicicleta de carretera entre otras actividades deportivas y por supuesto para disfrutar de sus calas y playas de gran belleza.
Siempre nos ha llamado la atención el gran número de ciclistas que se veían por la Isla por todas sus carreteras secundarias tanto en grupo como de manera individual. Así que la idea de vacaciones activas en esta ocasión fue combinar dos actividades totalmente diferentes, pero que se complementaran perfectamente. Así que nos dijimos: Vamos a comprobar si la isla reúne las condiciones necesarias para el disfrute del cada vez más popular deporte del ciclismo de carretera. Para complementar nuestra estancia y como una sola actividad nos parecía poco combinamos este deporte con la actividad de descensos de barrancos.
Iniciamos nuestra nueva andadura cargando el coche con todo el material necesario y salimos rumbo a Valencia puerto donde tomamos a las once de la noche el estupendo barco/ferry de nombre “Sorolla” lleno de todas las comodidades para llegar a Palma. Sobre las siete de la mañana desembarcamos y nos pusimos de camino a Deiá donde decidimos poner nuestra base logística. Deiá y sus alrededores es un lugar que invita al sosiego y a la tranquilidad, hermoso pueblo montañero, de gran belleza paisajística en armonía con las construcciones típicas de la zona, uno de los sitos más bonitos de la Sierra de Tramuntana, un pueblo que nos permitiría realizar sin grandes desplazamientos las dos actividades de ocio que habíamos decidido practicar.
Decidimos realizar tres excursiones con la bicicleta de carretera en la Sierra de Tramuntana por sus zonas más emblemáticas. Esta sierra constituye la alineación montañosa más grande de Mallorca y el espacio natural más extenso, de gran valor ecológico. Tiene una longitud aproximada de 90km, desde el cabo de Formentor en Pollença hasta el cabo de Sa Mola en Andratx del cual disfrutariamos, con una amplitud media de 15 km. Está orientada de suroeste a noreste, con 12 kilómetros cuadrados por encima de los 1000 metros. En la porción central se dan las elevaciones máximas de Mallorca, con los 1.447 m del Puig Major, los 1352 de Massanella.
AUTOR: Daniel Solana Crespo / Nieves Romero Covelo
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